Desde el comienzo del cristianismo la música fue empleada en las reuniones que, medio secretas, en lugares apartados y, casi siempre de noche, transcurrían entre lecturas, rezos y cantos, aunque de manera muy restringida, no solo porque las persecuciones obligaban a la discreción sino porque era muy pequeño el repertorio y pocos los intérpretes. La primera música utilizada fue la música hebrea y greco-romana. Se puede asegurar que emplearon ante todo la salmodia o declamación melódica de los salmos, que eran los antiguos poemas escritos por el rey David y por Asaf.
Grandes compositores de todas las épocas se han sentido atraídos por estas salmodias y melodías que invitaban a la reflexión, la contemplación y la oración.
La visualización de la vida entre las suaves melodías espirituales y hebráicas de este programa, invitan a la relajación y la meditación en todos los sentidos. Autores españoles como Eduard Toldrá y Jesús Ruera, junto con otros como Max Bruch, Maurice Ravel o Ernest Bloch, nos acompañarán en un concierto único.
Duración aproximada 60 minutos.